Un grupo de voluntarias de Polonia, Rusia, Turquía y República Checa ha comenzado el segundo campo de trabajo sobre educación en “nuevas masculinidades” que acaba de poner en marcha Patim. “Hablemos sin colores” es un proyecto encaminado a la prevención de la violencia de género que cuenta con respaldo del Servicio Civil Internacional (SCI) y se desarrolla en dos centros de Patim hasta principios de agosto.
Las personas que han elegido participar en esta iniciativa van a recibir una formación intensiva para que sean capaces de preparar y gestionar distintos talleres dirigidos a las personas que residen como pacientes en la comunidad terapéutica y para aquellas que acuden al centro de día de Patim. Para desarrollar su labor cuentan con el apoyo del equipo profesional de la entidad, material específico sobre masculinidades y, además, se les ha unido una voluntaria italiana de larga estancia que está trabajando la misma temática.
El SCI es una organización internacional que desde 1920 trabaja para “alcanzar la paz y el entendimiento entre los pueblos” a través de campos internacionales de voluntariado. Éstos apoyan proyectos solidarios sociales, ambientales o culturales en las comunidades locales y favorecen un espacio para el encuentro y el aprendizaje intercultural.