La barrera que separa a un menor de la posibilidad de apostar es la misma que tiene que superar para consultar su correo electrónico. Necesita una clave para acceder a un espacio en el que puede perderse. Patim celebra hoy el Día sin Juego de azar con el objetivo de poner de manifiesto los riesgos que suponen las apuestas on line y el juego sin control para los más jóvenes. Los datos de los últimos años advierten un incremento del número de personas que acuden a tratamiento por un problema de abuso en el juego hasta situarse en el 24% del total de pacientes atendidos en Patim en 2015.
A pesar de la prohibición legal, desde Patim se reclama a la administración estatal que se incrementen las medidas de control para evitar que un menor pueda acceder de forma fácil a realizar una apuesta deportiva o una partida de póker on line, especialmente desde el ordenador de su casa o su móvil. “La ludopatía es una enfermedad que no diferencia entre edades, cuando empiezan a jugar suele ser de una forma inocente, por diversión, pero a medida que se incrementa la frecuencia con la que juegan, es muy posible que aparezcan una serie de distorsiones cognitivas que generan una falsa sensación de control y eso les lleva a considerar que ganar en el juego depende más de la habilidad que del azar en sí”, explica Julio Abad, psicólogo de Patim. “El problema de abuso ya está ahí cuando miden el éxito de lo que hacen considerando sólo lo que se gana y no lo que se pierde, de modo que la función de jugar comienza a ser recuperar el dinero perdido”, puntualiza.
Abad señala una serie de comportamientos que resultan sintomáticos para detectar que alguien ha superado las barreras del juego responsable. “Cuando empiezan a mentir y a tapar la cantidad de horas que invierten en el juego, cuando se gastan más dinero del que llevan encima, cuando el juego se convierte en una estrategia de evasión o comienzan a tener ansiedad y pensamientos acerca del juego de manera constante hay que abordar esa situación con ayuda especializada”, explica.
Bajo el lema “Deja de apostar, no te la juegues”, Patim ha instalado una mesa informativa en el centro de Castellón, en el edificio de la Fundación Caixa Castelló, desde la que esta mañana ha sensibilizado sobre los riesgos del juego no responsable a la ciudadanía. “No estamos aquí para regalar cosas sino para informar sobre las adicciones”, explicaban los voluntarios, profesionales y pacientes, cuando se acercaban a alguna persona para entregarle la documentación de esta campaña. Patim cuenta con dos centros de tratamiento de adicciones no tóxicas en Castellón y otro en Valencia.
Para reducir el impacto de esta enfermedad en los próximos años, el presidente de Patim, Francisco López y Segarra, ha reclamado una mayor financiación para poder desarrollar programas dirigidos al tratamiento de las adicciones sin sustancia. Una propuesta que también defiende la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR), desde donde se plantea como medida “gravar un impuesto a todas las empresas comercializadoras del juego” para ese porcentaje redundado revierta en el tratamiento de los propios afectados. FEJAR insiste además en la “imperiosa necesidad” de aprobar una normativa que regule desde las propias administraciones la publicidad de los juegos de azar “aparcada desde hace más de un año”.
Esta jornada de sensibilización promovida por la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR) y el Ministerio de Sanidad se celebra de forma oficial el 29 de octubre, pero en Castellón se ha adelantado hasta hoy en colaboración con la Fundació Caixa Castelló.