Las conductas vinculadas con un uso abusivo de las tecnologías o las apuestas “on line” reclaman cada día mayor atención en los servicios especializados en adicciones. El perfil tradicional del jugador de máquinas tragaperras en bares o salas de juego va cediendo protagonismo en favor de quien utiliza el ordenador o el móvil. El 37% de las personas atendidas por adicciones no tóxicas es ya un jugador “on line”, según la Memoria 2021 de ASECEDI. En este grupo, las apuestas deportivas representan el 67% de casos y los videojuegos el 11%.

En el último año, las adicciones sin sustancia suponen el 11,6% del total de casos que han acudido a los centros de día que integran ASECEDI. Los datos recogidos en nueve centros de día de Madrid, Asturias, Andalucía, Comunidad Valenciana, Murcia y Cataluña, retratan el perfil de las adicciones sin sustancia –no tóxicas- como un hombre, mayor de 34 años soltero, con trabajo, estudios secundarios completos y de nacionalidad española, que acude a tratamiento por un problema con el juego en máquinas tragaperras en bares o por apuestas deportivas a través del ordenador. La muestra analiza 171 casos en todo el estado

“Engancharse a los videojuegos es fácil pero no lo es tanto tener una conducta adictiva, porque tienen que interactuar dos tipos de variables o factores; por un lado las que dependen de la capacidad adictiva del propio videojuego y por otro las vinculadas con la persona, factores internos como vulnerabilidad, autoestima, relaciones sociales, impulsividad”, explica el presidente de ASECEDI, Francisco López y Segarra. La brecha de género también es muy evidente, dado que solo el 7% de las intervenciones son con mujeres.

“Vivimos en un mundo cada vez más tecnológico, donde nuestro estilo de vida está cada día más vinculado a internet, que es un facilitador o la puerta de entrada para desarrollar este tipo de conductas, porque la percepción del riesgo de la tecnología todavía se está formando en los jóvenes”, detalla el educador social José González, del centro de día de Cáritas Salamanca. “Hay que ponerle barreras al entorno, antes que al sujeto”, añade. El 39% de los casos atendidos presenta además problemas legales asociados y el 38% un consumo de sustancias tóxicas.

El estudio epidemiológico de ASECEDI muestra además que el alcohol (51%) y la cocaína (22,7%) son la causa principal de los 1239 casos tratados por adiciones tóxicas en los centros de día. El cannabis se sitúa en tercer lugar (10,8%). Unos resultados que analizados con más detalle ponen en evidencia dos tendencias que, en opinión de González, deben impulsar una reflexión sobre el modelo actual en los centros de día. “Nos preocupa mucho el envejecimiento de un sector de la población que atendemos, un tercio de las personas tiene más de 45 años; por otro lado, apenas acude un 20% de mujeres, lo que nos obliga a replantearnos qué está ocurriendo para esta masculinización de los servicios, quizás tengan mucho que ver estigmas, estereotipos y roles de género sobre la mujer que hoy siguen muy vigentes de nuestra sociedad”, sentencia el técnico de prevención y atención a las drogodependencias y secretario de ASECEDI.

La Asociación española de centros de día de adicciones, fundada en 2003, está presente en siete comunidades autónomas y agrupa a 16 de estos centros ambulatorios gestionados por ONG. En 2021 ha atendido a 2.457 personas –incluyendo familias- a través de sus diferentes recursos de tratamiento, integración laboral y violencia de género.

Esdudio epidemiológico 2022