La digitalización de la sociedad ha impulsado también el avance del juego online. Y sus consecuencias son cada día más visibles en los centros de atención a las adicciones. Muchos servicios especializados –gestionados por organizaciones sociales- han comprobado cómo se está consolidando una tendencia al alza en el número de personas que demandan tratamiento, hasta situarse al mismo nivel que los casos de adicciones con sustancia.

Patim ha atenido en el último año a casi cincuenta personas en Castelló, a través del programa de juego patológico. Un servicio que se presta con el respaldo económico de CaixaBank y la Fundación Caixa Castelló. Uno de los datos más significativos que arrojan los últimos meses, es que el juego online ha superado al juego presencial, en cuanto a número de personas atendidas. Muchas familias reclaman una mayor protección para los menores ante las campañas de publicidad que lanzan las empresas de juego.

“Es muy importante que la sociedad tome conciencia de que todos llevamos un salón de juego en el bolsillo, en nuestro móvil, y hemos de construir nuevas respuestas lo antes posible para frenar sus consecuencias”, asegura el presidente de Patim. Por ello, todo apoyo –público o privado- resulta fundamental para frenar este impacto que “tiene una repercusión mayor en los colectivos más vulnerables”.

A través de la convocatoria de Acción Social 2022, CaixaBank y Fundació Caixa Castelló han respaldado los proyectos sociales de 36 asociaciones de la provincia. El objetivo marcado por ambas entidades, en esta edición, es impulsar el empleo, el desarrollo local y mejorar la calidad de vida de personas con discapacidad, mayores y otros colectivos en riesgo de exclusión social, como es el caso de quienes acuden a tratamiento a Patim.

Las líneas prioritarias establecidas por las bases de la convocatoria fueron los proyectos dirigidos a la creación de empleo, atención a refugiados o el desarrollo local. Estas iniciativas tienen como beneficiarias, especialmente, a personas con difícil empleabilidad, refugiados, jóvenes, parados de larga duración y personas dependientes con necesidad de asistencia.

El pasado 9 de noviembre tuvo lugar el acto de cierre de la actual convocatoria, que ha contado con una dotación total de 100.000 euros. Mediante imágenes facilitadas por las asociaciones participantes quedó plasmada la dedicación y el esfuerzo por atender las necesidades de distintos colectivos, ofreciendo unos servicios o propuestas de mejora de sus condiciones sociales. Los proyectos en esta edición son un 2,84% más que en 20221.