Patim ha puesto en marcha un programa de capacitación digital para las personas que acuden a su centro de empleo en Castellón. Se trata de un proyecto impulsado por la Conselleria de Innovación y Adecco para educar en competencias digitales a población en riesgo de exclusión.

Un grupo de quince personas desempleadas participa en estos talleres gratuitos. Son mayores de 45 años, en su mayoría con niveles educativos básicos y en el proceso de selección se ha priorizado que residan en zonas no urbanas o en barrios del extrarradio de Castellón.

El itinerario formativo de los talleres se ha adaptado a la población atendida por Patim. Está diseñado para que los conocimientos y habilidades adquiridos puedan incorporarse de forma inmediata por parte del alumnado, integrando en su vida nuevas herramientas digitales o favoreciendo su uso en la búsqueda activa de un empleo.

A lo largo de las sesiones programadas –durante una semana- se facilita un primer acercamiento al uso de la inteligencia artificial como herramienta laboral, se revisan fundamentos de ciberseguridad para proteger su privacidad y comunicaciones, y se presta especial atención a que sean capaces de encontrar con facilidad información en internet y realizar gestiones, de forma independiente, desde su propia casa.

Esta formación intensiva aborda las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) desde distintos ángulos con la finalidad de romper la brecha digital que supone, para estas personas, una limitación en el acceso al mercado laboral y que condiciona también su gestión con administraciones, bancos o servicios sanitarios. Además, se presta especial atención al uso y abuso del móvil y las redes sociales, en diferentes contextos.

“Tenemos que convertir la tecnología en una aliada para que logren sus objetivos, la alfabetización digital empodera a las personas, permitiéndoles navegar con confianza en un mundo cada vez más interconectado” explica la técnica del Servicio de Empleo de Patim, Luisa Arenós. “Las nuevas tecnologías se han convertido en herramientas fundamentales para acceder a los servicios públicos y también para gestionar la vida privada, debemos aprender tanto a evitar riesgos como a aprovechar sus potencialidades”, añade. Este proyecto está financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea.